Descubriendo Islandia

Después de un mes y medio aquí, debo decir que ha estado este fin de semana donde he descubierto los lugares más impresionantes de este país. Volvimos a repetir la aventura con otras aupairs, alquilamos un coche y nos fuimos a descubrir la isla. Nuestro rumbo era el norte, aunque terminamos haciendo casi toda la vuelta al país. Así que os invito a leer todo el post y a que podáis descubrir vosotros también un poquito de Islandia a través de las preciosas fotografías que podréis ver. Desde luego, es una aventura para contar!

Mi familia me dio permiso para terminar a las 4 y no a las seis, así que emprendimos nuestro camino temprano. Fueron unas cuatro horas de camino hasta Akureyri, pero cuando vas con otra gente el viaje se hace más ameno. Al llegar a Akureyri, nos recibió un tiempo horrible. Lluvia, viento, y creo que unos 2º por la noche. Acampamos la tienda rápidamente, y fuimos  cenar en un sitio cubierto que tenía el camping, donde conocimos a otros viajeros y compartimos experiencias.

La comida? Lo compré todo en el supermercado, y en mi bolsa había un paquete de pan bimbo, queso, jamón, yogures, patatas y zumo. Así que todos los días mis comidas fueron a base de sandwich. 

El dormir no fue precisamente un placer. La tienda estaba mojada y hacía mucho frío, además de que se oían los ronquidos de otra gente. Nos levantamos temprano, y la lluvia seguía en Akureyri. Aún el frío que hacía, la ciudad es preciosa, aunque es verdad que con el sol todo se aprecia mucho mejor.

La iglesia protestante de Akureyri

El arte callejero es muy común en Islandia

El gimnasio de Akureyri

Esta espectacular cascada estaba a una hora de Akureyri

Seguidamente visitamos un campo de cráters. Como podéis ver el tiempo mejoró.

Campo de cráters

Subimos a un volcán inactivo desde hace más de 1000 años, donde ahora dentro de él existe un desierto. 

Piscina natural de ague caliente. 

Llegamos en un sitio de agua hirviendo. La verdad es que fue impresionante, aunque el agua olía a huevo podrido.

Una peculiar manera de hacer fotos. Les enseñé esta imagen a esta pareja de chinos, y terminamos siendo amigos.

Esta es la parte de arriba de un volcán de gran altura. En el cráter se encuentra éste precioso lago.

A las 10 de la noche llegamos el Dullofoss, una impresionante casacada rodeada de una naturaleza salvaje. Lo mejor de todo fue que estábamos solas, y eso hizo que lo disfrutáramos el doble.

Al borde del abismo. Fué aterrador y a la vez alucinante!

Después de la visita a Dullofoss nos tocaba conducir durante un buen rato, hasta llegar al camping gratuïto que teníamos planeado. Pero la niebla nos acechó y estuvimos conduciendo en estas condiciones durante una hora. Casi tenemos un accidente, ya que una obeja decidió cruzar la carretera, y la vimos de milagro. A las doce de la noche, decidimos parar al primer camping que encontramos. 

A la mañana siguiente el tiempo había campado por completo. Hacía calor, y todo lo que la anterior noche era niebla se había convertido en unos paisajes alucinantes. Nos quedaban muchas horas de carretera por delante, y muchas cosas que visitar, así que a las 7:30 de la mañana dejamos el camping. El viaje se hizo placentero con este tipo de paisajes, recorriendo los fiordos y parando en pequeños pueblos pesqueros. 

Recorrimos los fiordos en coche

Un pequeño pueblo de pescadores disuado entre dos fiordos.

En Islandia también hay playas paradisíacas! La diferencia es que no te puedes bañar en ellas.

Después de muchas horas de carretera, parando en diferentes pueblos, hicimos una visita al glaciar más grande de Europa: Vatnajökull. Fue una de los sitios más impresionantes que he visto en mi vida, ya que nunca había visto un iceberg. Pudimos ver focas y todo, me sentí como en el polo norte.

Una pequeña foca nadando entre icebergs.

Para terminar, recorrimos el sud, y dos de los sitios más bonitos en los que paramos fueron estas cascadas. Al no tener tiempo, no pudimos parar a ver casi nada, pero eso no me preocupa porque yo voy a visitar todo Islandia en Septiembre.

Llegamos a Reykjavik a las 22:30h de la noche, así que me quedé en casa de una aupair, y a la mañana siguiente cogí un bus hasta mi pueblo. La verdad es que fue una aventura, y aunque terminé agotada porque no tuvimos ni un momento de relax, mereció la pena.

Os espero en el próximo post! :)